La espada jineta del último Rey Nazarí

Uno de los episodios históricos más representativos de la Península Ibérica fue la llamada Reconquista. Más de 700 años en los que las diferentes Coronas Cristianas lucharon para recuperar territorios que la invasión musulmana quitó de sus dominios. Esta época ha dado como fruto una gran diversidad arquitectónica y cultural en diferentes puntos de la península, uno de los más llamativos Granada, el último reducto musulmán que finalmente calló en manos de los Reyes Católicos en el 1492 y con él, el último Rey Nazarí : Boabdil el Chico.

El denominado bando moro se estableció en la península en 711, no solo trajo continuas disputas por el territorio, junto con su cultura los castellanos conocieron nuevos tipos de lucha y con ello nuevos tipos de armas.

Las espadas musulmanas eran muy distintas a las que el reino castellano blandía en la edad media. Estas, rectas y de una mano, pensadas para el combate cuerpo a cuerpo, diferían de las llamativas espadas que portaban los moros en las que se reflejaba el gusto musulmán, decoradas con diferentes grabados y de origen curvo tipo sables, las más populares son la cimitarra, la jineta y el alfanje.

En esta ocasión hablaremos de la jineta, pero de una en particular, la portada por el último rey nazarí.

Boabdil 1464-1527 , hijo de Abú-l-Hasán, contra quien se reveló y consiguió destronar gracias a la ayuda de lo abencerrajes, familia musulmana.

Su reinado en esta ocasión no duró un año completo, pues al año siguiente 1483, cayó preso de los Reyes Católicos, quienes acabarían con el reinado de esta dinastía 10 años después.

Durante su cautiverio, su padre recuperaría el trono de Granada, aunque Boabdil al poco tiempo fue liberado para crear disputas internas en el bando moro y finalmente con la muerte de su padre en 1487 se alzaría rey nazarí de Granada.

Su espada tipo jineta, de hoja recta pero acabada en curva de y de doble filo, producción nazarí traídas a la península por los primeros musulmanes bereberes.

Decorada de manera ostentosa denotaba la importancia de su portador, con guarnición de azófar, aleación de cobre y zinc. Pomo circular con perilla y grabados en anverso y reverso. Puño fusiforme totalmente cincelado. Arriaz con escudo trilobular y brazos caidos paralelamente a la hoja, bellamente decorados mediante las técnicas del damasquinado y nielado con oro y plata. Toda la empuñadura está adornada con inscripciones de árabe cúfico. Su hoja recta con un vaceo central poco profundo en la que por ambas caras se puede ver una marca de dos entrellas de cuatro puntas, tres círculos concéntricos conteniendo el intermedio quince crecientes y, el interior, un pequeño triángulo central, posiblemente, el punzón del armero. Toda ella a dos filos hasta la punta

HOJA: recta, con un vaceo central poco profundo, en el que figuran, por ambas caras, una marca nanqueada por dos estrellas de cuatro puntas, tres círculos concéntricos conteniendo el intermedio quince crecientes y, el interior, un pequeño triángulo central, posiblemente, el punzón del armero

nazari. Toda ella a dos filos hasta la punta

El fin de Boabdil, fue con su rendición en 1472 tras muchas negociaciones dirigidas por el Gran Capitán en representación de los Reyes Católicos. 

Pero su espada se quedó atrás 10 años antes con su captura, que fueron un regalo de los Reyes Católicos a Don Diego Fernández de Córdoba.

Esta espada se encuentra en el Museo del Ejército de Toledo, y es una de las piezas que se elaboran en nuestro taller.

Hemos realizado muchas réplicas de la Espada de Boabdil, al ser una espada tan distinguida y decorada tiene muchos adeptos. Pero no solo coleccionistas o aficionados a la historia de

España han adquirido esta pieza. Tuvimos el honor de elaborar una Espada de Boabdil para el museo del Castillo de Laujar de Andaráx, donde Boabdil buscó refugio al verse acorralado por los Reyes Católicos.

Además, es una pieza muy preciada para las recreaciones históricas que se llevan a cabo a lo largo del levante. Donde cada año sus Fílas, cada una en el papel de un bando o ejército, recrean las batallas y hechos históricos que sucedieron en sus tierras. Una de nuestras Espadas de Boabdil acompaña al encargado de representar el papel del último rey Nazarí en Alcoy, acompañado por su ejército moro de Abencerrajes con Dagas Musulmanas forjadas también en nuestro taller.