El imperio de Alejandro Magno: importancia de la Kopis Griega
Alejandro III de Macedonia (356 a.C- 323 a.C ) o como también era conocido, El Grande o Alejandro Magno, es una de las figuras más famosas de la Historia Antigua debido a su breve pero intensa vida ya que tuvo una gran transcendencia en el mundo de su época debido a sus conquistas y hazañas.
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Hijo de Filipo II de Macedonia y de Olimpia de Epiro, fue adiestrado desde su infancia con un duro entrenamiento físico y mental, destacando entre sus tutores al filósofo Aristóteles.
Filipo II fue uno de los personajes más importantes del mundo helénico y fue quien puso los cimientos del imperio que más tarde culminaría su hijo. Devolvió la paz y la estabilidad al reino macedonio además de comenzar la expansión de sus dominios.
Sus conquistas militares fueron de gran estrategia ya que aportaron un gran desarrollo económico al reino.
Otro de los grandes avances del Rey Filipo II fue la renovación y profesionalización de su ejército, consiguiendo uno de los mayores y más disciplinados ejércitos de la época.
Filipo II reorganizó a los llamados hetairoi, escoltas reales que conformaban una tropa a caballo, y los armó a todos con los mismos recursos. Coraza metálica, jabalina y espada cuya especialidad era la carga. Adaptándose a la lucha de sus contrincantes Griegos armados por la temida Kopis Griega, espada en forma de sable diseñada para la carga a caballo.
La hazaña más importante fue la conquista macedonia de Grecia iniciada en el 342 a.C y culminada con la victoria de Queronea, batalla en la cual fue ayudado por su hijo. Esta conquista supuso la hegemonía macedonia sobre el mundo griego, por lo que su nueva aspiración fue la conquista del imperio persa.
Sus planes se truncaron ya que justo en ese momento fue asesinado en la boda de su hija Cleopatra y Alejandro Magno le relevó con tan solo 20 años de edad pero una amplia experiencia militar y aspiraciones.
Con el nuevo rey, algunas ciudades griegas comenzaron su rebelión pensando en que un inexperto Alejandro no sabría sofocarlas. Pero desgraciadamente para ellos Alejandro tenía claro que quería reinar y asedió todo aquello que podía suponerle un problema, como fue la ciudad de Tebas.
Una vez resueltos los problemas internos, centró su ambición en el plan de su padre, hacerse con el imperio persa y expandir su imperio hacia el este.
La conquista del imperio persa comenzó en 334 a.C, en esta primer incursión en Asia Menos Alejandro iba acompañado de 37mil efectivos entre los que se encontraban 12mil soldados de la falange macedonia, 3mil hipaspistas, 1800 hetairoi la caballería de elite, 9mil soldados de caballería e infantería griegos además de infantería ligera y 200 naves en el ejército de mar.
En el Rio Gránico tuvo lugar su primera gran victoria y después continuó su marcha por la costa sur de Turquía, en poco más de un año tenía la mayor pare de la Península de Anatolia.
Su contrincante el Rey Dario III cada vez más inquieto por el avance de Alejandro Magno, intentó por todos los medios frenar el avance, involucrándose el mismo a pie de batalla en muchas de estas como en la Batalla de Issos 333 a.C , en la que finalmente fue derrotado por Alejandro El Grande.
Alejandro Magno continuó su avance, haciéndose con ciudades clave para los persas como Gaza y Tiro, privando a Darío III de las bases que tenían en la costa mediterránea y en el 331 a.C llegó al Delta del Nilo donde fundó la primera de sus Alejandrías y ganándose a la población y Dioses egipcios, que se encontraba subordinada a los persas.
En el año 330 a.C consiguió la victoria definitiva contra Darío III en la Batalla de Gaugamela, presentes a pie de batalla ambos líderes, Alejandro Magno consiguió la huida de Darío III que finalmente sería asesinado por sus propios nobles.
A los resquicios que quedaban del imperio persa no les quedó otro remedio que asumir a su nuevo rey, Alejandro Magno fue aclamado a su llegada a Babilonia y continuó hacia las pocas ciudades persas que quedaban sin haber visto su paso. Finalmente se hizo con Persépolis, capital del imperio persa, y derrotó al predecesor de Darío III que se había refugiado en Afganistán.
Pero las aspiraciones de Alejandro El Grande no se frenaron, su gran sueño era llegar hasta los confines del mundo conocido y por ello en 327 a.C se adentró en la India. Sin embargo estas aspiraciones hicieron que su ejército empezara a resentirse, ya que llevaban años en el frente, esto sumado a la resistencia de las tribus indias en su avance obligaron a Alejandro Magno a retornar, aun así conquistando todo territorio por el que pisaba, logrando llegar hasta donde ninguna persona había conseguido llegar.
En 324 a.C Alejandro llegó a Persépolis y en 323 a.C cambió la capital a babilonia, ciudad que llenó de monumentos que recordaran su grandeza para toda la eternidad. Ese mismo año falleció no se sabe a ciencia cierta si por una enfermedad o envenenado.
Las aspiraciones de Alejandro Magno de fundar un imperio mundial morirían junto con el, ya que tras su fallecimiento sus generales pasaron a repartirse los territorios conquistados haciendo que uno de los más grandes imperios conseguidos también se convirtiera en uno de los mas breves.
Alejandro Magno logró todos sus méritos debido a dos factores importantes, su astucia y su ejército, este último conservo del reinado de su padre Filipo II la falange, tropa de élite constituida por 16 hombres y 3 tipos de guerreros de a pie.
Los Hipaspistas que eran los portadores de escudos, luchaban cuerpo a cuerpo y portaban protecciones además del escudo y sus armas eran una lanza corta y una espada corta o puñal. Y los asthetairoi y pedzetairoi, que acompañaban a los Hipaspistas a pie aunque con un armamento más ligero y cuyas armas defensivas eran una sarisa larga (lanza) para el avance y una espada corta para el combate cuerpo a cuerpo.
Además también se encontraban arqueros entre estas filas y la base del ejército pasó a ser la caballería.
Con el avance de Alejandro Magno en el mundo griego, su ejército pasó a reunir soldados de las diferentes culturas y aunque los macedonios tenían mayor reconocimiento el número de griegos en sus filas pasó casi a igualar a los macedonios y con ellos sus técnicas de lucha y armas pasaron al ejército macedonio entre ellos la Kopis Griega.
Los soldados de mayor confianza de Alejandro Magno formaban la caballería pesada, y estos eran los portadores de la espada aclamada por Alejandro Magno, la Kopis. Ya que era un sable de carga que se utilizaba a caballo. Formaban escuadrones de unos 200 hombres y cabalgaban en forma de cuña para perpetuar el ataque al enemigo.
57. Espada Kopis· FORJANDO LA HISTORIA